La Batalla de Città della Fortuna. Reino de Napoles (1503)


El gran Condestable de Francia, el señor Duque de La Culebre observo el despliegue de sus flamantes huestes.
Esta vez esos zarrapastrosos españoles no les podrían parar.

Observó en la lejanía a su izquierda el estándarte del señor Jose de Vicente, antiguo alcaide del Alcazar de Segovia. Enemistado con su reina Isabel tras hablar sobre la promiscuidad del rey Fernando, había preferido ponerse sl servicio del rey de Francia en vez de ser alojado en los niveles inferiores del Alcazar del que era alcaide.
Con él estaban la mayor parte de los gendarmes, flor y nata de la nobleza francesa, amen de un grupo de ballesteros que ocupaban la granja junto a una batería de cañones.
En el centro francesa 2 bloques de piqueros franceses no excedisamente predispuestos, (no se puede pedir a esos plebeyos que esten a la altura de la nobleza), acompañaban a 3 bloques de Suizos, los más efectivos y caros piqueros que el dinero puede comprar. Al mando de estos bloques se encontraba el conde Carlos de Serrano, otro castellano luchando para el rey de Francia (unos oscuros asuntos de recaudación de impuestos le hicieron replantearse su lealtad). Si flanco derecho estaba cubierto por otra batería de cañones. Y en su retaguardia, junto al campamento, se encontraban un grupo de Gendarmes dispuestos como reserva.
El flanco derecho galos estaba compuesto por ballesteros a caballo y a pie, y dos grupos de arcabuceros Suizos, desplegados estos para ocupar el bosque enfrente suyo, amén de amenazar el campamento enemigo.

Enfrente estaban las huestes Trastamaras del duque David Lopez de Coslada, el gran Capitan como decían sus hombres.
El flanco derecho lo conformaban jinetes y arcabuceros a caballo, al mando del marques Alfonsini di Quattro Stagioni, conocido por su fortuna.
En el centro flanqueados por una batería a cada lado se encontraban arcabuceros y lansquenetes al mando del señor Julián Apagafuegos, conde de Ocaña.

Dos Coronelias, junto a las Guardias de Castilla y Gendarmes italianos acompañados por mas arcabuceros se situaban en el flanco izquierdo Trastamara protegiendo el campamento español. Al mando se encontraba el duque de Guadalajara. La AJ de su estandarte lo dejaba claro.

La batalla comenzó tras honorablemente ceder el movimiento a los españoles.

Por el flanco izquierdo francés avanzaron los Gendarmes. La caba italiana enfrente de ellos se encaró y lucho valientemente retrasando el avance francés. Lamentablemente se impuso la veterania y nobleza francesa (ayudo además de eso que eran caballos y jinetes acorazados versus jinetes con una armadura ligera como mucho). Los artilleros cercanos a ese combate decidieron largarse viendo lo que se venía encima.

En el centro el fuego español fue apabullante. Su objetivo fueron los bloques franceses que viendo el apocalipsis que se cernio sobre ellos decidieron dar media vuelta y correr. Dejando un enorme hueco en la linea francesa.
Por suerte para los franceses, los fiables suizos chocaron con las Coronelias y piqueros. En un salvaje combate de picas la cosa termino en tablas. Menos en la derecha del choque, en el que las picas suizas empujaron poco a poco a sus oponentes.

En el flanco derecho frances todo fue mal para los españoles, las guardias de Castilla cayeron en una zona de fuego por todos lados que fue demasiado para ellos, huyendo ante las bajas. Los gendarmes italianos que fueron a cubrir la zona cayeron en una emboscada en el bosque, siendo cargados por el flanco por los ballesteros italianos y empujados.

Con ambos flancos en huida solo era cuestion de tiempo que el centro español fuera flanqueado. El gran Capitan decidió que era mejor retirarse y luchar otro dia.

Que pasada de partida!!! Es época de partidas

Saludos

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